Mátame de placer, porque solo tu eres el autor de ese asesinato y solo tú puedes llevarlo a cabo.
Mátame, como se mata el tiempo un día de verano.
Quiero morir sintiendo el calor de tu cuerpo.
Mátame de placer para pronunciar tu nombre tartamudeando.
Mátame, de lunes a viernes, lentamente..
Si me matas, hazlo aquí y ahora, pero antes déjame sobrevivir y aferrarme a tu boca durante escasos segundos.
Hazlo para quedar en silencio y únicamente escuchar el latido acelerado de tu corazón.
Condéname a tus caricias, aún sabiendo que soy inocente.
Deseo morir por cometer el pecado de saborear tu aroma y envolverme en el.
O tal vez por contener el aire y olvidarme de respirar.
Esperaré mi muerte, quiero que pruebes los delirios de mi boca y antes, escuchar tu voz susurrándome que me amas.
Mátame de placer y muere conmigo, alcancemos por un momento ese estado de frenesí.
Mírame a los ojos y lleva acabo uno de los crímenes más deliciosos.
Cumple mi deseo, el único que tengo, quitame la vida o más bien haz que vuelva a nacer.
Que mis mejillas se sonrojen, aunque sea tan solo un instante, para después volverse frías y duras como el mármol.
Que mis ojos se cierren poco a poco...
Ven y mátame, estaré esperando.
No hay comentarios:
Publicar un comentario