Un cero a la izquierda.
¿Cómo curamos la soledad interna?
Me mata por dentro el pasar de la vida desde mi ventana,
y no comprendo a nadie.
Ni a mi misma, conmigo misma.
Con mis silencios, mis quejas, mi gritos ahogados.
La miseria de tenerme, como un cero a la izquierda.
¿Valgo la pena?
Quiero arder en la hoguera,
como pueblo que arde por la rabia de sus venas.
Sin temor.
Esta soga invisible que rodea mi cuello,
necesito caer,
ver si alguien me echa de menos, o de más.
Observar el mundo desde arriba,
volar sobre los campos de gris ceniza.
Irme,
quizás no volver.
No hay comentarios:
Publicar un comentario