No daré las gracias, eso ya lo dije demasiadas veces.

Solo diré que me siento muy afortunada de tenerlos, 

que por ellos sonreía desde dentro,

que por ellos mis ojos se iluminaban,

a cada palabra,

a cada sonrisa que me dedicaban.

Se puede decir que estos días han conseguido que la felicidad que tenía escondida desde hace tiempo,

saliera al exterior por todos y cada uno de mis poros.

Han conseguido que disfrute tanto como una niña chica cuando conoce algo nuevo.

Y vuelvo a repetir que no quiero dar las gracias,

porque ellos se merecen más que un simple agradecimiento.

Son tan grandes, 

que pienso que en algún momento sus corazones explotarán por estar llenos de tantísimo cariño.

Disfrute tanto del tiempo, de lo vivido, que no me importaría repetirlo de nuevo.

Vivir como dijeron, nuevas experiencias.

Me alegro de que estéis ahí, a mi lado.